Morelia, Michoacán — En una sesión extraordinaria del Congreso del estado, Grecia Itzel Quiroz García, viuda del alcalde de Uruapan Carlos Manzo, rindió protesta este miércoles como presidenta municipal sustituta, entre gritos de apoyo de simpatizantes y llamados a no retroceder en la lucha contra la violencia que costó la vida a su esposo. 

La toma de protesta se realizó ante el pleno del Congreso michoacano, donde la propuesta fue aprobada por unanimidad de los diputados presentes —reportes locales señalan 38 votos a favor y ninguno en contra—, en una sesión marcada por la emoción y la tensión política. 

Durante su intervención, Quiroz lanzó consignas que se convirtieron en el emblema de la jornada: “¡Carlos Manzo vive!” y “¡Ni un paso atrás!”, y aseguró que continuará con el proyecto y el “legado” de su esposo, además de exigir que el crimen no quede impune y reclamar la atención de las autoridades frente a la violencia en la región. 

La ceremonia se efectuó bajo un fuerte dispositivo de seguridad: la alcaldesa sustituta llegó al Congreso en una camioneta blindada y estuvo custodiada por elementos de la Guardia Nacional y el Ejército, además de refuerzos locales, luego del homicidio que conmocionó a la entidad. 

Carlos Manzo fue asesinado el 1 de noviembre, en el centro histórico de Uruapan, al término de la inauguración del Festival de las Velas; el ataque, que según las autoridades habría sido perpetrado por presuntos integrantes del crimen organizado, desató protestas y exigencias de justicia en la ciudad. En los días posteriores se informó de detenciones y del abatimiento de uno de los agresores mientras las fiscalías mantienen abierta la investigación. 

La asunción de Quiroz se interpreta en el ámbito político local como un acto de continuidad del llamado “Movimiento del Sombrero” —la estructura política impulsada por Manzo— y como una respuesta simbólica a la violencia que atraviesa la región. Legisladores de oposición y miembros del movimiento aplaudieron la decisión del Congreso; mientras tanto, organizaciones civiles y parte de la población mantienen la demanda de medidas efectivas de seguridad y de una investigación transparente. 

Autoridades federales y estatales han prometido seguir con las pesquisas para esclarecer el homicidio y llevar a los responsables ante la justicia; para la nueva presidenta municipal, la primera tarea será garantizar la seguridad de la población y coordinar la reconstrucción de la gobernabilidad local golpeada por el hecho.